Un día normal

Quiero un día normal
Donde el pasto siga siendo
más verde al otro lado.
Los días comiencen cuando salga el sol
la rutina me abrume hasta el sopor
y con aquella modorra
sucumbir a mis deseos de inacción.

Quiero un día normal.
Quiero azul celeste aunque me cueste.
Que no todo sea fácil
ni venga por añadidura.
No quiero perder la cordura,
por favor, hoy no.

Quiero respirar profundo y continuar.
rendirme ante la costumbre inveterada
de hacer lo correcto
de llenar requisitos impuestos por el tedio.
Y que todo sea normal.

Quiero que cuando vaya a mi pueblo
y alguien me diga:
¿Cuándo me darás una buena noticia?
yo pueda contestar:
!Qué! ¿No te has enterado?
Será en diciembre.