Aunque parezca sencillo, no es tan fácil descubrir lo que realmente uno quiere, sobre todo cuando el mundo te presenta miles de opciones diariamente. Opciones de todo tipo. De hecho en República Dominicana una persona recibe 20,000 mensajes publicitarios, de los cuales puede asimilar sólo 3. En Europa cada individuo recibe 50,000 e incorpora 4 y en Estados Unidos 160,000 mensajes y analiza 12*. Y todos estos mensajes pretenden hacerte ver que tal o cual producto es el que quieres y que necesitas.
Hay veces que lo que uno quiere es un sentimiento, algo abstracto y difícil de describir con palabras y sólo un poeta como Pedro Guerra lo puede expresar con la exactitud en que el propio corazón lo experimenta...
Quiere que no midas cada paso
quiere que no des pasos de más
quiere que la quieras
y le enseñes dónde queda
la felicidad.
Quiere que la abraces y la calmes
quiere que la dejes descansar
quiere que sonrías y le cures las heridas
de la soledad.
Quiere todo el tiempo
para respirar
y que respires
tiempo para dar
cuidar
cuidarte y que la cuides,
tiempo
para amar tu amor
amar su amor
llamar armar
y amarte amor.
Quiere que le des espacio y tiempo
quiere que le cuentes tu dolor
quiere que la quieras
y encender como una hoguera
toda su pasión
quiere que la amarres a tus besos
en el paladar de tu sabor
quiere que sonrías
y sentirse protegida
de tu corazón.
* Datos obtenidos en charla José Daniel Barquero, Instituto ESERP, España.